Ya no recuerdo la última vez que toqué el límite del espacio, o con quién en realidad estuve ahí. Recuerdo los colores y las espirales. Recuerdo que se siente como tener la piel tatuada de figuras vivas. Recuerdo que más allá está la espiral de espirales y en su vértice, fuerza y pureza primigenias.
Me mantengo en el exilio, me niego a salir del desierto si no he de encontrar más allá las tierras ricas y fértiles. Prefiero perder la sangre en la búsqueda, prefiero seguir por siempre a los espectros y dejarme secar la mirada en el sacrificio sin altar.
jueves, septiembre 21, 2006
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1 comentario:
"Ferni era tan sabio y antiguo, que a Salomón aconsejaba. Vivió la era del hielo, qué frío, y a los mamuts domesticaba".
Poesía urbaaaaaana, master.
JRC
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