sábado, julio 15, 2006

aequilibrĭum negatīvus

Como maldición egipcia, es una idea coronada de bronce. Ya no es maldita mi soledad, pero necesito la compañía. La añoro, la deseo. Hay tanto espacio y tan poco tiempo. No hay suficiente Shai-Hulud para vivirlo todo, ni lo de afuera ni lo de adentro.

Mi bota izquierda hace un sonido como de roedor cuando camino sobre la alfombra de la biblioteca. La mente de Joyce se sienta a mi lado pero no me atrevo a explorarla. Después de todo, él sabe de esa maldición a la que me refiero; quién sabe qué más pueda encontrar en esas líneas. Me siento un poco mareado.

La imagen es la portada del verano de 1999 de Sword Forum, editada en GIMP para darle ese color; el original es plateado. Es, a mi entender, la espada ideal para Kretzel.

jueves, julio 06, 2006

Zafiro ya no me habla

Yo sería buen viento si fuera el viento de debajo de tu falda. Se antoja desdoblar y leer. Yo solo juego hasta que exista motivo para ser serio.
La imagen vale para dos días, porque me esforcé haciéndola. Una vez también me esforcé por un zafiro.

miércoles, julio 05, 2006

tesoros, no mapas

No creo en el catolicismo. Me es más fácil creer en la imagen de una chica católica irlandesa, con su cruz celta de plata sobre el pecho lleno de pecas: la única que podría desayunar bebiendo cerveza conmigo. Claro está, también tendría el talento de Alicia Liddell para recitar.

lunes, julio 03, 2006

pesadillas...

Tuve un par de sueños horribles. En uno de ellos, tenía cancer y me daban radioterapia. Todo me dolía. No me quiero morir así. Morir no es nada, pero hervir desde dentro mientras mi mismo cuerpo me devora, no es precisamente mi idea de existir. El otro sueño era por lo menos tan terrible como esto, pero no me atrevo a comentarlo. Según ese sueño, ya sé porqué me quedé herido para siempre, y no, no tiene nada que ver con nadie. También hay discapacidades emocionales; yo tengo varias.
Antes soñaba con el apocalipsis y bestias terribles; una vez soñé que me disparaban al corazón y viví toda mi muerte, desde la caída hasta que todo se apagó. Ni siquiera eso fue tan terrible. Prefiero eso a las pesadillas de anoche.
Y no había razón real para soñar eso; hace una vida que no soñaba nada que me asustara. Asco, tengo asco. Quien sea, por favor, deme consuelo. Por favor.