
Recuerdo haber sido joven y haber temblado al poner en papel mis ideas. Es tan poderosa la palabra.
Aún hoy, a veces me estremezco al hablar de frente con algunas criaturas. No tengo intenciones de sobrevivir a este mundo, pero si ha de consumirse, lo devoraré yo mientras la esencia permanezca en mí.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario